Algunos padres y madres se quejan de que sus hijos no son nada responsables. Otros saben que sí lo son, pero quieren que lo sean más.
Pero, ¿podemos ayudar a nuestros hijos e hijas, que están entrando en la adolescencia, a que vayan haciéndose cada vez más responsables y maduros?. La respuesta es sí. La educación en responsabilidad debe empezar desde la infancia. Pero nunca es tarde. Ahora que van a entrar de lleno en la adolescencia, podemos ayudarles a que cumplan con sus tareas, a que respeten las normas de casa y de la escuela, a que tengan un comportamiento sano y seguro para ellos mismos y para los demás.
Ahí van algunos cosas que podemos hacer para ayudarles:
- Dales responsabilidades. No podrá aprender a responsabilizarse si no le damos la ocasión de que lo sea. Pero adecuadas y que sepamos que son capaces de asumir. Ya será momento más adelante de incrementar las responsabilidades. Si tu hijo o hija no recoge nunca la habitación, es difícil de que se haga responsable de la limpieza de toda la casa. Quizás deberías darle algunas responsabilidades más adecuadas como empezar a hacerse la cama todos los días o tirar su ropa sucia al cubo de la colada.
- Confía en él o ella. Tienen que ver tu confianza en ellos. Si el adolescente sabe a ciencia cierta que confías en él o ella será más fácil que cumpla con sus responsabilidades. Además confiará más en sí mismo y se verá capaz de conseguirlo. Verán que confías en ellos cuando respetes sus decisiones.
- Déjale que se equivoque y consigue que admita su error. De los errores se aprende y nos marcan el camino por el que no hay que ir. Cuando admita que ha cometido un error, procura que no sea para él una humillación sino que le sirva de reflexión para el futuro. Aprenderán que las decisiones tienen consecuencias.
- Asegúrate que las normas están claras. Esto es fundamental. Le ayudarán a saber que es lo que puede hacerse y qué es lo que no. Las normas ambiguas no crean más que confusión y le incitan a buscar la manera de trampearlas.
- Negocia con él las normas. Le ayudará a asumirlas como propias lo cual le acercará a su cumplimiento.
- Ayúdale a administrar su tiempo. A veces, la falta de tiempo hace que no puedan cumplir con sus obligaciones. Si se organizan mejor llegarán mejor a cumplirlas, pero para eso necesitan ayuda. Que hagan listas con las tareas y los tiempos que van a dedicar a ellas.
- Pídele su opinión. Que vea que su opinión es importante y que te interesa. Con esto pones en valor su valía y le ayudas a comprometerse más con sus obligaciones.
El Gobierno de Navarra ha elaborado un documento que os puede ayudar en este sentido. Es recomendable, al menos, echarle un vistazo. No será tiempo perdido.
El documento se titula
No hay comentarios :
Publicar un comentario